INTRODUCCIÓN

Cuando hablamos de las necesidades de las personas, nos referimos a aquellos bienes o servicios que todos necesitamos en nuestro diario vivir, aquellas cosas que nos permiten llevar un mejor estilo de vida (alimentos, ropa, etc). Cuando hacemos referencia a estos bienes, estamos involucrando igualmente empresas, que son las encargadas de cumplir con estas necesidades básicas del ser humano. Pero para estas empresas, es importante destacarse entre la competencia y satisfacer las necesidades de sus clientes de tal manera que estos las prefieran por encima de las demás.

Para ellos, es esencial que la empresa destaque en todos los ámbitos posibles, tanto por la calidad de sus productos como por la eficiencia de sus trabajadores, y nada de esto puede ser posible sin una organización adecuada que le ofrezca a la compañía y sus trabajadores las herramientas adecuadas para poder salir adelante y destacarse a nivel nacional, y si es posible, a nivel internacional. Es por ellos que en este Blog analizaremos las organización tradicional de una empresa y la nueva tendencia, para entender un poco mejor su importancia en el mundo empresarial.

LA ORGANIZACIÓN

La organización de una empresa es muy importante no solo en la actualidad, también hace un tiempo atrás, puesto que ella puede determinar el éxito o el fracaso en el mercado en el que se desenvuelva; con el paso del tiempo la competencia aumenta y el ambiente en el que se vende un producto o un servicio se va volviendo más dinámico, por lo que se generarán más necesidades en los individuos. Además de esto, la economía va evolucionando y esto también genera repercusiones en una empresa cuyo fin es posicionarse como una de las mejores en cuanto a ventas y calidad de sus productos. 

A nivel interno de la empresa, los trabajadores reflejan lo que puede llegar a ser una empresa, y el trabajo en equipo se ve plasmado en la unión de ideas que estos puedan llegar a tener para sacar adelante la compañía y atraer más clientes gracias a algunas estrategias como las de mercadeo, que deben ir evolucionando mediante las herramientas que le permitan hacerlo, como el internet. Es por esto que la organización de una empresa genera una constante evolución; tan solo estas son algunas de las más importantes características que se tienen en cuenta a la hora de comparar una empresa tradicional con una empresa de nuevas tendencias.

Pero para que todo esto pueda ser posible, y la empresa logre manejar una adecuada organización, se necesita una persona capaz de ofrecerle a dicha empresa las herramientas necesarias para lograr todos estos objetivos; es ahí donde entra el líder, que debe contar con una serie de características que sean adecuadas para llevar el mando de la empresa y de sus trabajadores de manera eficaz y eficiente. Un verdadero líder le garantiza a una compañía posicionarse como una de las mejores en cuanto a la calidad de sus y/o productos.
Existen algunos tipos de liderazgo: el liderazgo por contingencia, donde el líder tomas las mejores decisiones para orientar a su empresa al éxito y evitar así factores que puedan generarle pérdidas en las ganancias monetarias o en la calidad; el liderazgo camino-meta donde el líder destaca por ser un agente de motivación y por la manera en la que incentiva, por medio de reconocimientos, a sus trabajadores a alcanzar las metas planteadas; el liderazgo normativo donde el líder tomas las decisiones que más le convengan a la empresa ya sea por su conocimiento propio o teniendo en cuenta las opiniones o ideas de los demás trabajadores de la empresa; y por último, el liderazgo situacional donde primero se hace un análisis de los trabajadores para así determinar que tipo de liderazgo se requiere de acuerdo a los resultados que se adquieran.

Además del liderazgo que es un factor de suma importancia en una empresa, pues es este y sus decisiones los que llevaran a la compañía al éxito o al fracaso, como ya se dijo anteriormente, en la organización también existen unos métodos que se adaptan a las metas de una empresa. Algunos de los métodos más importantes y reconocidos son: el método conductual que analiza el comportamiento y el perfil de una persona de acuerdo a como se adapta esta al trabajo en equipo o a los diferentes tipos de motivación con los que pueda reaccionar, para así entender mejor la manera en la que la calidad de su trabajo se puede ver afectada de manera tanto positiva como negativa; el método sistemático donde se puede analizar como se relacionan los procesos de una empresa para llegar así a una meta en común y alcanzarla por medio de la dinámica en cuanto a su visión interna; por último está el método de contingencia donde la evolución de del entorno en el que se mueve la empresa la obliga a adaptarse y a buscar mejores maneras de vender su producto y mantener la calidad de su servicio, por medio de unas técnicas que eviten que la empresa se vea afectada en la evolución de dicho entorno.

ORGANIZACIÓN: TRADICIÓN VS. ACTUALIDAD

Entre las organizaciones tradicionales y las actuales existen tanto similitudes como diferencias en sus modelos. Algunas de las diferencias radican en:

Las organizaciones tradicionales están enfocadas a resaltar el trabajo individual de una persona en una empresa; como trabaja y cuales son sus características en el ámbito laboral, mientras que en la actualidad se trabaja en equipo, y las empresas destacan más como un todo generando así ganancias para este empresa y para los consumidores, quienes necesitan satisfacer sus necesidades por medio de estas compañías. Además, la metodología actual es más eficiente la hora de lograr los objetivos planteados desde el punto de partida.

Las organizaciones de antes solo se enfocaban en mantener el mismo nivel en las empresas, mientras que en la actualidad, la globalización ha obligados a las empresas a modificar sus estrategias continuamente para innovar y resaltar sobre la competencia, puesto que con el tiempo el mercado evoluciona y las necesidades de las personas crecen.

Tiempo atrás, las empresas conocían antes las necesidades de los clientes para elaborar así un producto que las pudiera satisfacer, a diferencia de ahora que las empresas crean los productos y hacen usa de la tecnología y las redes sociales para llegar  las personas y convencer al cliente que este necesita el producto; de esta manera se le incentiva a adquirirlo, sin importar cuales sean las verdaderas necesidades de dichas personas. Además de esto, los gerentes han adaptado sus compañías para elaborar los productos de manera más acorde a las necesidades de cada individuo, dado que antes la elaboración de esos productos tenía una idea más general de los clientes, sin analizar a cada uno de estos.

El uso de las TIC (Tecnologías de la Información y la Comunicación) le ha permitido a las empresas extender sus estrategias para llegar más fácilmente a los consumidores, ya sea por medio de redes sociales o de páginas web que les facilitan información sobre los productos, e inclusive, les permite adquirirlos en un menor lapso de tiempo.

La competencia también se ha convertido en un factor de gran importancia a la hora de hablar de la organización de una empresa, dado que cada vez son diferentes las necesidades que tienen las personas y las estrategias de mercadeo deben irse modificando para así llamar la atención del cliente y resaltar entre la competencia, que aumenta a medida que aparecen más empresas enfocadas a la realización de productos ya existentes.

En las organizaciones tradicionales, la relación entre jefe y sus trabajadores era más formal y no había una gran interacción entre ellos. Con el paso del tiempo, las empresas han ido desarrollando un mejor trabajo en equipo y esto incluye la manera en la que tanto el jefe y sus empleados trabajan en grupo y relacionan ideas que puedan ayudar a mejorar sus servicios y productos, todo con un mismo fin; sacar adelante la empresa y posicionarla a nivel tanto nacional como internacional si es posible. 

CONCLUSIÓN

Después de analizar toda la información y entender mejor como funciona la organización tradicional y la nueva tendencia, y la importancia que tiene esta en el ámbito empresarial, podemos concluir que es necesario replantear la forma de organización antigua pues el mundo está en constante evolución y las personas empiezan a desarrollar nuevas necesidades que se deben satisfacer por medio de productos o servicios de buena calidad. 

Pero la competencia es alta y una empresa que no esté dispuesta a abrir su mente para diseñar estrategias innovadoras, que no cuente con líder capaz de ver la empresa como un todo y que no haga buen uso de las herramientas que se le ofrecen, no encontrará más que fracaso y grandes pérdidas más que todo en el nivel económico, demostrando así su poca capacidad para competir en el mercado.